Aunque Selena siempre tuvo una imagen estable, lejos de los excesos, su representante confirmó que el mes pasado, la morocha ingresó en un centro de rehabilitación para superar una serie de problemas emocionales y anímicos.
“Selena decidió someterse voluntariamente a un tratamiento psicológico en el centro de rehabilitación Meadows. Sus problemas nada tienen que ver con una supuesta adicción a ningún tipo de sustancia”, reveló un portavoz de la artista, desmintiendo las especulaciones que apuntaban a que la estrella del pop estaba tomando mucho alcohol y saliendo todas las noches.
Además, su representante agregó: “Hay que tener en cuenta que Selena lleva años trabajando sin parar y con una intensidad que muchos no podrían soportar. Para ella, salir de fiesta es una forma de escapar del estrés y la presión del mundo de la música. Ahora necesita descansar y olvidarse por unos meses de su carrera profesional para centrarse en su salud”.
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